La Casa de enfrente
De: Esteban Navarro
En otro post ya os comenté que hay libros por los que te sientes atraído a causa de lo que dicen las críticas de los medios y la de los que entienden de estas cosas del leer, las más de las veces por la pequeña sinopsis de la parte posterior del mismo, esa que suele estar detrás de la cubierta, muchas por lo que aportan otros blogueros con respecto a ellos contando su experiencia personal a lo largo de su lectura; y las menos por la ilustración de la portada, algo que los editores cuidan desde hace unos pocos de años a esta parte para utilizar como cebo con los compradores compulsivos que no buscan algo en particular.
Pues confieso que esta última ha sido esta vez la causa de escoger este en particular. Eso y el género del que se trata, pues este es el mes de la novela negra y policíaca, evento organizado por "Laky" de -Libros que hay que leer-
Después de esta larga explicación, me meto en harina.
Nos situamos en una pequeña localidad costera llamada Roquesas de Mar que anda conmocionada por la desaparición de una muchacha de 16 años llamada "Sandra López". Todos especulan y barajan hipótesis y sospechosos, hasta que el cadáver irreconocible de la chica aparece cerca de la casa de uno de los vecinos más respetables y adinerados del pueblo: "Álvaro Alsina".
Se trata de un hombre de negocios que dirige una empresa fundada por su padre, empresa que fabrica componentes y software para ordenadores y que esta a punto de cerrar un importante contrato con el gobierno.
Es entonces cuando todo empieza a derrumbarse alrededor de "Álvaro" su mundo, levantado con tanto esfuerzo se tambalea en el momento en que todas las pruebas parecen apuntar hacia él.
Su mujer, sus hijos, su socio y empleados, su amante y sus vecinos empezarán a mirarle como asesino, pederasta y violador.
Tendrá que demostrar su inocencia y aportar pruebas que le liberen de una posible y casi segura condena.
"La sociedad juzga a sus miembros por anticipado."
Bien, pues este es el resumen a groso modo del libro que comento. Una historia cuya trama desde un principio está llena de posibilidades y que atrapa al que la empieza. Ahí el autor acierta, escogiendo la dinámica adecuada para conseguirlo.
Nos plantea un suceso inédito que acaece en un pueblo tranquilo en el que nunca ocurre nada relevante, una localidad que nos parece cercana y conocida, hasta su nombre nos suena conocido, como de haber veraneado en ella.
A partir de aquí empieza a bombardearnos con la presentación de un montón de personajes habituales, pero que a lo largo del relato veremos que son del todo prescindibles, como con la sana pretensión de ocultar al culpable desde el comienzo y despistar al lector en uno de esos ejercicios tan habituales que los que leen este tipo de novelas acostumbra a hacer: intentar descubrir al asesino desde el principio y sospechar del menos sospechoso.
De esta forma conoceremos a "Cesar Salamanca" el jefe de policía local y amigo de la infancia de "Álvaro Alsina", al director del banco principal "Cándido Fernández", "Luis Aguilar" el arquitecto, "Elvira Torres" la doctora y compañera de"Rosa Pérez" la mujer de "Álvaro" que es a su vez amante de este.
y así un largo rosario de personajes secundarios: Sus hijos "Javier" e "Irene" la canguro de estos "Sofía Escudero" apodada la cíngara. La sirvienta de la familia "María Becerra", el abogado defensor del acusado "Nacho Heredia", el socio de la empresa "Juan Hidalgo", un gitano peligroso "José Soriano", un camarero cubano llamado "Pablo Marín". Y de esta forma un larguísimo etc que nos resultará un poco cargante por lo innecesario de tanto elenco.
hasta un ex-nazi de la temible gestapo está establecido por allí.
"Uno de los peores pecados capitales es querer que los demás sean como nosotros."
El ritmo del relato es trepidante pero ciertas descripciones como la calle donde está ubicada la vivienda de la familia se repite en exceso, así como el nombre de la localidad, no ocurre lo mismo con los restaurantes y bares de los que parecen existir una buena selección para todos los gustos. La sensación que llegué a tener durante la lectura, es que algo no encajaba desde el principio.
Algo chirriaba en el engranaje argumental algo que no acababa de convencerme.
Los sentimientos de odio-amor-celos-envidia-bajas pasiones-infidelidades-vicios ocultos, tendencia sexual, intentos de seducción. Todo aparece de continuo como una cascada interminable, todas las personas tienen algo en común: ninguna parece ser trigo limpio, todos tienen algo que ocultar. En última instancia son sospechosos de algo que los liga entre ellos y convierte un relato de suspense en un culebrón latino donde nadie sale bien parado.
Incluso hay una intervención policial desde Madrid. Se aportan unos agentes para la investigación del crimen, que sin embargo en los capítulos finales parece aclararse por si solo de forma muy precipitada y que nos deja la interrogante de el porqué de esos dos investigadores...y su papel en la trama.
Por otro lado ya sabemos que la novela negra está sembrada de escenas macabras y sangrientas donde las víctimas son asesinadas, torturadas o despedazadas. Aquí se nos relatarán los hechos desde dos escenarios diferentes. Por un lado el trascurso de la vida cotidiana de "Alvaro" su familia y vecinos y las inevitables complicaciones del protagonista, a partir del descubrimiento del cuerpo de la chica; y por otro lado los momentos vividos por la víctima en su lugar de encierro y las vejaciones y abusos llevadas a cabo por su secuestrador.
La prosa es natural y directa, sin filigranas y sin retórica, pero los diálogos simples y pueriles en algunos casos, como de actores de teatro noveles que no han sabido meterse en el papel.
Llegará un momento, que con algo de perspicacia y pistas que se nos dan, no se si de manera premeditada o por despiste del autor preveremos el final, sin dar apenas opción a la sorpresa.
No puedo decir de este libro auto-editado que carezca de mérito, pues por delante, va mi más sincero respeto al escritor que es capaz de lanzarse a esta aventura en la que yo personalmente no me he atrevido a dar el primer paso. Pero la crítica imparcial es lo que tiene, y lo dicho es lo sentido por un servidor después de concluida la lectura.
No obstante es de ley comentaros que este autor ha recibido varios premios en su trayectoria como escritor, y que este libro ha estado encabezando listas de ventas por delante de escritores de reconocimiento internacional.
"Esteban Navarro" ha escrito bastante más. En concreto una serie a la que le tengo echada el ojo y cuyo personaje principal es un policía nacional llamado "Moises Guzmán" cuyos títulos son: - El buen Padre- Los fresones rojos- y -Los ojos del escritor- que tienen en algunos foros buenas críticas. Por tanto más adelante quizás le de una nueva oportunidad.
Su última publicación es del reciente año pasado. Se trata de -Los crímenes del abecedario- de otra serie en la que su primer título fue - La noche de los peones- y de la que se espera un tercero para este año 2015.
Este título, y no puedo ser parcial a pesar de otras opiniones que la enmarcan como una lectura trepidante y genial; a mi personalmente, me ha resultado un tanto floja y predecible.
En la próxima pondré más cuidado en no fiarme tan solo de la ilustración de las tapas.
"Los hombres suelen pasar media vida planeando lo que hacer durante la segunda mitad de su existencia, y pasan la segunda arrepintiéndose de lo que no hicieron durante la primera"
De: Esteban Navarro
En otro post ya os comenté que hay libros por los que te sientes atraído a causa de lo que dicen las críticas de los medios y la de los que entienden de estas cosas del leer, las más de las veces por la pequeña sinopsis de la parte posterior del mismo, esa que suele estar detrás de la cubierta, muchas por lo que aportan otros blogueros con respecto a ellos contando su experiencia personal a lo largo de su lectura; y las menos por la ilustración de la portada, algo que los editores cuidan desde hace unos pocos de años a esta parte para utilizar como cebo con los compradores compulsivos que no buscan algo en particular.
Pues confieso que esta última ha sido esta vez la causa de escoger este en particular. Eso y el género del que se trata, pues este es el mes de la novela negra y policíaca, evento organizado por "Laky" de -Libros que hay que leer-
Después de esta larga explicación, me meto en harina.
Nos situamos en una pequeña localidad costera llamada Roquesas de Mar que anda conmocionada por la desaparición de una muchacha de 16 años llamada "Sandra López". Todos especulan y barajan hipótesis y sospechosos, hasta que el cadáver irreconocible de la chica aparece cerca de la casa de uno de los vecinos más respetables y adinerados del pueblo: "Álvaro Alsina".
Se trata de un hombre de negocios que dirige una empresa fundada por su padre, empresa que fabrica componentes y software para ordenadores y que esta a punto de cerrar un importante contrato con el gobierno.
Es entonces cuando todo empieza a derrumbarse alrededor de "Álvaro" su mundo, levantado con tanto esfuerzo se tambalea en el momento en que todas las pruebas parecen apuntar hacia él.
Su mujer, sus hijos, su socio y empleados, su amante y sus vecinos empezarán a mirarle como asesino, pederasta y violador.
Tendrá que demostrar su inocencia y aportar pruebas que le liberen de una posible y casi segura condena.
"La sociedad juzga a sus miembros por anticipado."
Bien, pues este es el resumen a groso modo del libro que comento. Una historia cuya trama desde un principio está llena de posibilidades y que atrapa al que la empieza. Ahí el autor acierta, escogiendo la dinámica adecuada para conseguirlo.
Nos plantea un suceso inédito que acaece en un pueblo tranquilo en el que nunca ocurre nada relevante, una localidad que nos parece cercana y conocida, hasta su nombre nos suena conocido, como de haber veraneado en ella.
A partir de aquí empieza a bombardearnos con la presentación de un montón de personajes habituales, pero que a lo largo del relato veremos que son del todo prescindibles, como con la sana pretensión de ocultar al culpable desde el comienzo y despistar al lector en uno de esos ejercicios tan habituales que los que leen este tipo de novelas acostumbra a hacer: intentar descubrir al asesino desde el principio y sospechar del menos sospechoso.
De esta forma conoceremos a "Cesar Salamanca" el jefe de policía local y amigo de la infancia de "Álvaro Alsina", al director del banco principal "Cándido Fernández", "Luis Aguilar" el arquitecto, "Elvira Torres" la doctora y compañera de"Rosa Pérez" la mujer de "Álvaro" que es a su vez amante de este.
y así un largo rosario de personajes secundarios: Sus hijos "Javier" e "Irene" la canguro de estos "Sofía Escudero" apodada la cíngara. La sirvienta de la familia "María Becerra", el abogado defensor del acusado "Nacho Heredia", el socio de la empresa "Juan Hidalgo", un gitano peligroso "José Soriano", un camarero cubano llamado "Pablo Marín". Y de esta forma un larguísimo etc que nos resultará un poco cargante por lo innecesario de tanto elenco.
hasta un ex-nazi de la temible gestapo está establecido por allí.
"Uno de los peores pecados capitales es querer que los demás sean como nosotros."
El ritmo del relato es trepidante pero ciertas descripciones como la calle donde está ubicada la vivienda de la familia se repite en exceso, así como el nombre de la localidad, no ocurre lo mismo con los restaurantes y bares de los que parecen existir una buena selección para todos los gustos. La sensación que llegué a tener durante la lectura, es que algo no encajaba desde el principio.
Algo chirriaba en el engranaje argumental algo que no acababa de convencerme.
Los sentimientos de odio-amor-celos-envidia-bajas pasiones-infidelidades-vicios ocultos, tendencia sexual, intentos de seducción. Todo aparece de continuo como una cascada interminable, todas las personas tienen algo en común: ninguna parece ser trigo limpio, todos tienen algo que ocultar. En última instancia son sospechosos de algo que los liga entre ellos y convierte un relato de suspense en un culebrón latino donde nadie sale bien parado.
Incluso hay una intervención policial desde Madrid. Se aportan unos agentes para la investigación del crimen, que sin embargo en los capítulos finales parece aclararse por si solo de forma muy precipitada y que nos deja la interrogante de el porqué de esos dos investigadores...y su papel en la trama.
Por otro lado ya sabemos que la novela negra está sembrada de escenas macabras y sangrientas donde las víctimas son asesinadas, torturadas o despedazadas. Aquí se nos relatarán los hechos desde dos escenarios diferentes. Por un lado el trascurso de la vida cotidiana de "Alvaro" su familia y vecinos y las inevitables complicaciones del protagonista, a partir del descubrimiento del cuerpo de la chica; y por otro lado los momentos vividos por la víctima en su lugar de encierro y las vejaciones y abusos llevadas a cabo por su secuestrador.
La prosa es natural y directa, sin filigranas y sin retórica, pero los diálogos simples y pueriles en algunos casos, como de actores de teatro noveles que no han sabido meterse en el papel.
Llegará un momento, que con algo de perspicacia y pistas que se nos dan, no se si de manera premeditada o por despiste del autor preveremos el final, sin dar apenas opción a la sorpresa.
No puedo decir de este libro auto-editado que carezca de mérito, pues por delante, va mi más sincero respeto al escritor que es capaz de lanzarse a esta aventura en la que yo personalmente no me he atrevido a dar el primer paso. Pero la crítica imparcial es lo que tiene, y lo dicho es lo sentido por un servidor después de concluida la lectura.
No obstante es de ley comentaros que este autor ha recibido varios premios en su trayectoria como escritor, y que este libro ha estado encabezando listas de ventas por delante de escritores de reconocimiento internacional.
"Esteban Navarro" ha escrito bastante más. En concreto una serie a la que le tengo echada el ojo y cuyo personaje principal es un policía nacional llamado "Moises Guzmán" cuyos títulos son: - El buen Padre- Los fresones rojos- y -Los ojos del escritor- que tienen en algunos foros buenas críticas. Por tanto más adelante quizás le de una nueva oportunidad.
Su última publicación es del reciente año pasado. Se trata de -Los crímenes del abecedario- de otra serie en la que su primer título fue - La noche de los peones- y de la que se espera un tercero para este año 2015.
Este título, y no puedo ser parcial a pesar de otras opiniones que la enmarcan como una lectura trepidante y genial; a mi personalmente, me ha resultado un tanto floja y predecible.
En la próxima pondré más cuidado en no fiarme tan solo de la ilustración de las tapas.
"Los hombres suelen pasar media vida planeando lo que hacer durante la segunda mitad de su existencia, y pasan la segunda arrepintiéndose de lo que no hicieron durante la primera"