La Chica que llevaba una pistola en el tanga
De. Nacho Cabana
Se trata de la novela que ganó el premio L´H Confidencial del 2014 promovido por el ayuntamiento de L´ Hospitalet de Llobegrat que ha creado a su vez una biblioteca cuyos fondos están basados solo con novela de este género.
Ya de comienzo el título que nos presenta el autor es elaborado, y hasta visualizar su propuesta nos lleva a una especie de morbo sensual, y algo catártico en su pretensión. Puede parecer a simple vista, de esa que los lectores muchas veces pretendemos tener, un título bisoño e intrascendental, algo así como reclamo para los imprudentes, y cuyo contenido deja mucho que desear para las expectativas que ponemos en el argumento.
Tengo que confesar con humildad, que nada más alejado de la realidad. En este caso la enjundia de la historia supera con creces toda idea sobre superficialidad literaria.
Y es que el argumento aún siendo ficticio, se basa en la cruda verdad de una sociedad corrompida hasta sus cimientos y que pasa de largo y por encima de las noticias escabrosas que de vez en cuando nos son trasmitidas como muy "quedito" por los noticiarios y la prensa.
Y es que me estoy refiriendo a la trata de blancas y la prostitución, la explotación sexual de mujeres y niños-as, la mafia que anda detrás de todo ello y los millones de divisas que mueve este mundo oscuro solo equiparado al de tráfico y venta de armamento y droga.
El autor ya de por si tiene imagen de tipo duro, y de la misma manera ha querido reflejarlo en su premiado libro; con dureza y seriedad relatada sin adornos ni sentimentalismos, sin palabra de prosa suave; más bien como a martillazos, sin omitir alguna descripción escabrosas que venga a cuento, para que el lector se imbuya de esa praxis testimonial del que es espectador en directo de los sucesos, aunque sin rayar en el mal gusto ni el exceso de sangre y vísceras.
Quizá basa más su dureza en lo psicológico, el choque entre lo irracional y lo racional. La búsqueda de ese límite donde se pasa del placer a la mera brutalidad a causa de ese "gen" violento y primitivo que todos llevamos como un "chip" dentro de nuestra piel.
La desazón y la desmesura que nos trasmiten los acontecimientos narrados, juegan un papel de importancia.
La historia comienza con una carrera desaforada por la Gran vía de Madrid, de un coche policial conducido por "Violeta" a la que acompaña"Carlos". Una pareja de agentes de la comisaria de Leganitos cuyo desconocimiento respectivo, parece condicionar su relación. Ambos acuden a los bajos de Plaza de España donde se está produciendo un ataque racista a una familia de ciudadanos rumanos con consecuencias fatales, y la detención de una pareja de supuestos radicales xenófobos.
La acción es trepidante a partir de aquí. Nada de pararnos a analizar la situación y valorar los resultados de las investigaciones y las pruebas. ¡No! a partir de aquí se nos inoculará una dosis de adrenalina para que vayamos metiéndonos en una trama escabrosa que nos conducirá a otro extremo del mundo. Para ser concreto a México D.F, donde un español de nombre "Pedro" afincado allá, brega por mantener a su pobre familia y sacarla adelante con su cortito sueldo de taxista.
Todo le es válido para recaudar un poquito más, aún tratándose de las comisiones que reciba por acercar a clientes hasta las puertas de los clubes de alterne; pero todo tiene su precio, todo sus consecuencias y "Pedro" tendrá que tomar decisiones que pueden costarle la vida y lo que es más, las de su mujer "Itzel" y su hija "Olga".
Ir para adelante es meterse en un mundo donde las conciencias son interrogadas, ir para atrás supone la condena segura a muerte.
" Cuando alguien decide perder algo, lo hace porque juzga lo que gana como más importante."
En España. "Violeta" con 40 años, que además de policía, es mujer de armas tomar, seguirá las pistas, que la llevan desde un poblado chabolista donde habitaban los rumanos agredidos, hasta Murcia, donde lleva el rastro de los agresores detenidos. Un burdel de mala muerte donde lo que encuentran eriza la piel de los dos agentes y pone sobre la pista de algo mucho más peligroso que las armas cargadas... Un tal "Vergasanta" está detrás de todo el tinglado.
" Violeta clava la mirada en los ojos autosuficientes de.... antes de pegarle al primero una patada en la cabeza."
" Violeta habla con Ferrero, su inspector jefe y la persona que le enseñó a desaprender todo lo que le habían inculcado en la academia "
"Violeta siempre ha preferido pedir perdón que pedir permiso"
Los personajes son descritos de forma casi minuciosa, incluso nos colaremos en alguna faceta íntima de alguno de ellos, pero quedarán eclipsados por el ritmo del relato con acción desbocada.
Tiros y cadáveres orlarán el recorrido de nuestra lectura, donde no encontraremos rincón donde escondernos para asimilar los escenarios tan bien descritos o los ambientes que incluso respiraremos con ahogo. Ambientes oscuros, siniestros y escatológicos, donde perderemos la fe en la bondad de ser humano y abundaremos en abusos, violencia y maltrato.
El lenguaje utilizado por "Nacho Cabana" es versátil y actual. Rico en términos y giros lingüísticos propios del país que nos describe, con profusión de usos y costumbres. Los protagonistas parecen reales más que ficticios, creíbles dentro de sus vivencias cotidianas y sus diálogos naturales sin rastro de artificio literario.
El autor por otro lado ha realizado una buena labor documentativa sobre los escenarios en los que trascurren las dos historias que por otro lado, concurren de forma lógica en una sola con fluidez, los acontecimientos van solapándose poco a poco originando un final donde todas las piezas encajan.
La historia cumple todos los requisitos que exigimos al género negro- policíaco y nos deja al concluir, un cierre inesperado junto con una sabor de boca agridulce que nos hace desear más de este escritor que parece haber entrado con paso de gigante en el mundo literario.
Es hora que conozcamos a estos escritores españoles que nos están sorprendiendo con novelas de tal rango, que no desmerecen ante la de nórdicos y americanos que parecen abastecer el mercado ellos solos.
El nivel que están poniendo es un listón muy alto, con títulos merecedores de mención en nuestros blogs y el mundillo de la crítica literaria. Hay editoriales, de hecho, que tienen sus miras en autores de este tipo y están triunfando con sus elecciones.
Por lo tanto, y si sirve de algo mi opinión: mis parabienes al autor y mi recomendación para que todo aquel que busque, una historia creíble, impactante y muy pero que muy negra y espeluznante, se acerque a esta novela que tiene un buen merecido premio en su haber y tiene argumento y cimiento suficientes para ser llevada a la gran pantalla. ¡ Eso sí ! con una buena producción que no la desluzca.
En una palabra: ¡Chapó!
De. Nacho Cabana
Se trata de la novela que ganó el premio L´H Confidencial del 2014 promovido por el ayuntamiento de L´ Hospitalet de Llobegrat que ha creado a su vez una biblioteca cuyos fondos están basados solo con novela de este género.
Ya de comienzo el título que nos presenta el autor es elaborado, y hasta visualizar su propuesta nos lleva a una especie de morbo sensual, y algo catártico en su pretensión. Puede parecer a simple vista, de esa que los lectores muchas veces pretendemos tener, un título bisoño e intrascendental, algo así como reclamo para los imprudentes, y cuyo contenido deja mucho que desear para las expectativas que ponemos en el argumento.
Tengo que confesar con humildad, que nada más alejado de la realidad. En este caso la enjundia de la historia supera con creces toda idea sobre superficialidad literaria.
Y es que el argumento aún siendo ficticio, se basa en la cruda verdad de una sociedad corrompida hasta sus cimientos y que pasa de largo y por encima de las noticias escabrosas que de vez en cuando nos son trasmitidas como muy "quedito" por los noticiarios y la prensa.
Y es que me estoy refiriendo a la trata de blancas y la prostitución, la explotación sexual de mujeres y niños-as, la mafia que anda detrás de todo ello y los millones de divisas que mueve este mundo oscuro solo equiparado al de tráfico y venta de armamento y droga.
El autor ya de por si tiene imagen de tipo duro, y de la misma manera ha querido reflejarlo en su premiado libro; con dureza y seriedad relatada sin adornos ni sentimentalismos, sin palabra de prosa suave; más bien como a martillazos, sin omitir alguna descripción escabrosas que venga a cuento, para que el lector se imbuya de esa praxis testimonial del que es espectador en directo de los sucesos, aunque sin rayar en el mal gusto ni el exceso de sangre y vísceras.
Quizá basa más su dureza en lo psicológico, el choque entre lo irracional y lo racional. La búsqueda de ese límite donde se pasa del placer a la mera brutalidad a causa de ese "gen" violento y primitivo que todos llevamos como un "chip" dentro de nuestra piel.
La desazón y la desmesura que nos trasmiten los acontecimientos narrados, juegan un papel de importancia.
La historia comienza con una carrera desaforada por la Gran vía de Madrid, de un coche policial conducido por "Violeta" a la que acompaña"Carlos". Una pareja de agentes de la comisaria de Leganitos cuyo desconocimiento respectivo, parece condicionar su relación. Ambos acuden a los bajos de Plaza de España donde se está produciendo un ataque racista a una familia de ciudadanos rumanos con consecuencias fatales, y la detención de una pareja de supuestos radicales xenófobos.
La acción es trepidante a partir de aquí. Nada de pararnos a analizar la situación y valorar los resultados de las investigaciones y las pruebas. ¡No! a partir de aquí se nos inoculará una dosis de adrenalina para que vayamos metiéndonos en una trama escabrosa que nos conducirá a otro extremo del mundo. Para ser concreto a México D.F, donde un español de nombre "Pedro" afincado allá, brega por mantener a su pobre familia y sacarla adelante con su cortito sueldo de taxista.
Todo le es válido para recaudar un poquito más, aún tratándose de las comisiones que reciba por acercar a clientes hasta las puertas de los clubes de alterne; pero todo tiene su precio, todo sus consecuencias y "Pedro" tendrá que tomar decisiones que pueden costarle la vida y lo que es más, las de su mujer "Itzel" y su hija "Olga".
Ir para adelante es meterse en un mundo donde las conciencias son interrogadas, ir para atrás supone la condena segura a muerte.
" Cuando alguien decide perder algo, lo hace porque juzga lo que gana como más importante."
En España. "Violeta" con 40 años, que además de policía, es mujer de armas tomar, seguirá las pistas, que la llevan desde un poblado chabolista donde habitaban los rumanos agredidos, hasta Murcia, donde lleva el rastro de los agresores detenidos. Un burdel de mala muerte donde lo que encuentran eriza la piel de los dos agentes y pone sobre la pista de algo mucho más peligroso que las armas cargadas... Un tal "Vergasanta" está detrás de todo el tinglado.
" Violeta clava la mirada en los ojos autosuficientes de.... antes de pegarle al primero una patada en la cabeza."
" Violeta habla con Ferrero, su inspector jefe y la persona que le enseñó a desaprender todo lo que le habían inculcado en la academia "
"Violeta siempre ha preferido pedir perdón que pedir permiso"
Los personajes son descritos de forma casi minuciosa, incluso nos colaremos en alguna faceta íntima de alguno de ellos, pero quedarán eclipsados por el ritmo del relato con acción desbocada.
Tiros y cadáveres orlarán el recorrido de nuestra lectura, donde no encontraremos rincón donde escondernos para asimilar los escenarios tan bien descritos o los ambientes que incluso respiraremos con ahogo. Ambientes oscuros, siniestros y escatológicos, donde perderemos la fe en la bondad de ser humano y abundaremos en abusos, violencia y maltrato.
El lenguaje utilizado por "Nacho Cabana" es versátil y actual. Rico en términos y giros lingüísticos propios del país que nos describe, con profusión de usos y costumbres. Los protagonistas parecen reales más que ficticios, creíbles dentro de sus vivencias cotidianas y sus diálogos naturales sin rastro de artificio literario.
El autor por otro lado ha realizado una buena labor documentativa sobre los escenarios en los que trascurren las dos historias que por otro lado, concurren de forma lógica en una sola con fluidez, los acontecimientos van solapándose poco a poco originando un final donde todas las piezas encajan.
La historia cumple todos los requisitos que exigimos al género negro- policíaco y nos deja al concluir, un cierre inesperado junto con una sabor de boca agridulce que nos hace desear más de este escritor que parece haber entrado con paso de gigante en el mundo literario.
Es hora que conozcamos a estos escritores españoles que nos están sorprendiendo con novelas de tal rango, que no desmerecen ante la de nórdicos y americanos que parecen abastecer el mercado ellos solos.
El nivel que están poniendo es un listón muy alto, con títulos merecedores de mención en nuestros blogs y el mundillo de la crítica literaria. Hay editoriales, de hecho, que tienen sus miras en autores de este tipo y están triunfando con sus elecciones.
Por lo tanto, y si sirve de algo mi opinión: mis parabienes al autor y mi recomendación para que todo aquel que busque, una historia creíble, impactante y muy pero que muy negra y espeluznante, se acerque a esta novela que tiene un buen merecido premio en su haber y tiene argumento y cimiento suficientes para ser llevada a la gran pantalla. ¡ Eso sí ! con una buena producción que no la desluzca.
En una palabra: ¡Chapó!