Coracha:
1-Saco de cuero que se empleaba para transportar
mercancías como tabaco, cacao, etc. desde América hacia España.
2-Una coracha es
un lienzo de muralla que protege la comunicación entre
una fortaleza y un punto concreto que no está lejos de dicha
fortificación. Lo más común es que se utilice para proteger el acceso al lugar
de suministro de agua cuando éste se encuentra fuera del recinto fortificado.
La coracha suele terminar en una "torre del agua" que protege en su
interior el pozo o la fuente de abastecimiento. A veces su adarve puede tener
doble pretil, pues puede ser atacada por ambos flancos.
Por ser un elemento
defensivo que sólo existe en la península ibérica, no existen los
correspondientes topónimos en los demás idiomas europeos (salvo en
el idioma portugués, couraça)
Aduar:
(Del ár. beduino duwwār) Pequeña población
de árabes nómadas formada por tiendas o cabañas.
Conjunto de tiendas y viviendas pobres que se
levantan en zonas marginales y forman una especie de poblado.
Mórbido:
Que es blando o suave y delicado.
Morboso (que es indicio o causa de enfermedad).
Blando- delicado- suave- morboso- malsano- enfermizo.
Empavonar:
Cubrir con pavón un objeto de hierro o
acero. Siendo el pavón un óxido abrillantado
de color azulado, negro o café, con que se cubren las piezas de acero para
mejorar su aspecto y evitar la corrosión.
Arreglarse con exageración. Untar o pringar
alguna cosa
Caliginosa:
Que es nebuloso, turbio, oscuro o tenebroso.
Denso, oscuro, brumoso, calinoso, calimoso nebuloso,
bochornoso
Texto:
A media
tarde fuimos apercibimos por el capitán. Cada cuál fue metiendo en
su coracha lo más preciado; algo de
oro y joyas, tabaco de mascar y mechas secas para el arcabuz.
Recogimos
raudos la especie de aduar que
habíamos construido para protegernos de los elementos y salvaguardarnos de
la humedad y los mórbidos mosquitos
que eran causa de fiebres que conducían a la muerte.
Una
muerte que seguro encontraríamos sin mediar ellos en su causa.
Envolvimos las
patas de las caballerías con trapos, para evitar ruido.Nos enfajamos y y
apretamos los herrajes de las corazas,
envainando
nuestras espadas empavonadas, dispuestos
ya a partir, huyendo de los perseguidores a través de la caliginosa selva.
Unos
sucesos que relatarían los cronistas y que siglos después se conocerían como
los de "la noche triste"