Subir de
nuevo a la habitación para acostarme, va significar todo un desafío después de
haber bajado a la cocina para ver que encuentro en la nevera.
No puedo
evitar comer entre horas, y cuando llega la noche y no consigo dormir, me entra
un hambre de mil demonios que no puedo refrenar.
Mi fuerza de
voluntad no es suficiente. Por tanto, no tengo otra que ceder a mis impulsos y
con un esfuerzo réprobo, bajar lentamente las escaleras para picar algo, y
matar el gusanillo.
Derechos de autor: Francisco Moroz
Jajajaja, o subirte una neverita como las que hay en los hoteles, ¿no crees?
ResponderEliminar¡pero qué ocurrente eres, Francisco! con siete líneas me has hecho soltar una carcajada.
¡Un beso fuerte, amigo!
Soluciones hay para todo, pero si se las ofrezco al protagonista, me quedo sin relato. ja,ja.
EliminarGracias por tu carcajada amiga.
Besos
Desde luego corto pero bueno y encima me he reído mejor que mejor. un abrazo. TERESA.
ResponderEliminarvuestras risas son mi premio, me encanta teneros alegrándonos la jornada mutuamente.
EliminarBesos y gracias Teresa.
¡Muy bueno amigo! Hago lo mismo, me levanto cuando tengo hambre. Eso si la nevera la tengo cerca del dormitorio. Un abrazo
ResponderEliminarLa nevera abría que tenerla muyyyyyy lejos para andar y hacer algo de ejercicio. Me consta que no es tu problema Mari del Carmen. ¡Menos mal!
EliminarBesos
A mì me pasa cuando al medio dìa debo bajar las escaleras desde mi oficina a la cocina, para calentar mi almuerzo. Luego estoy tan llena y con sueño, que me da pereza volver a subir. ¡Què tortura para nosotros los gorditos!
ResponderEliminarJa,ja,ja. ¿Tú gordita? no me lo creo.
EliminarEn todo caso lo de la pereza y el sueño después de comer es un síntoma típico de todo ser humano que se precie de su normalidad. La siesta es un gran invento.
Abrazos
Jajaja, me has engañado pensaba que era el inicio de una historia más larga, pero me gustó como la cerraste. No hay más, quizá tenga que ponerle una silla ascensor al pasamanos. BIEN!!
ResponderEliminarCreo que os dejáis engañar con suma facilidad. Sois muy generosos. Lo del ascensor es una buena idea, pero hay que hacer mucha obra y eso da más pereza que subir y bajar. La dieta también da pereza. je,je,je.
EliminarBesos María.
Cuanto dices con tan poco. No puedo dejar de recordar la novela "Big brother" de Lionel Shriver que reseñé hace poco. Terrible encontrase encerrado en un cuerpo de esas dimensiones y no poder hacer nada para corregirlo. A veces despreciamos a esas personas y las culpamos de su situación, pero hay más cosas de las que parece en todas partes.
ResponderEliminarUn beso.
Cuánto. Se me fue el acento.
ResponderEliminar¡Bah! no te preocupes de ese acento de menos, a mi se me pasan muchos a lo largo de los renglones que escribo.
EliminarLa obesidad mórbida es una enfermedad y no son así por comer en exceso, ni mucho menos. Otros sin embargo se lo buscan ellos solitos al no saber moderarse en sus comidas y en la calidad de las mismas.
En todo caso nunca debemos burlarnos de estas personas. Yo personalmente nada más que me río de los imbéciles cuando los reconozco.
Besos
¿Y una escalerita mecánica? ¡¡Otra buena solución al problema!!
ResponderEliminarUn micro estupendo, Francisco.
Mil besos
Tú también buscando soluciones al problema. Una escalera mecánica tipo "Corte Inglés" puede costar una pasta gansa. Dinero, que el personaje podría gastarse en un gimnasio y ahorrársela en comida basura.
EliminarBesos Chari.
¿Ahora empiezan a ser un problema? ¡¡Pues ya han tardado!! jajajja. Yo casi mejor dejaba la cama arriba, que alguna caloría gastará en bajar las escaleras :P
ResponderEliminarNos da risa, pero realmente es una tragedia. Me cuesta entender que haya personas con tan poco autocontrol como para llegar a esos extremos. Y conste que lo dice una a la que le encanta comer :P
Muy ocurrente, Francisco, me ha encantado!!
Besillos de finde.
Ha ido engordando poco a poco y va detectando el problema gradualmente. Debe de ser que en esta ocasión ha jadeado más de la cuenta o a tenido que pararse a recuperar el aliento en un peldaño inferior al de ayer.
EliminarDejémoslo en drama que la tragedia está en no poner freno al problema.
Gracias Julia y besos de los nuestros.
Has sabido sacar el humor y provocarnos una sonrisa, aunque como dice Julia, la obesidad mórbida es un gran problema y esa incapacidad para poder dejar de comer y esa repetición de conductas que dañan, pero sin control se siguen haciendo una y otra vez y que destruyen.
ResponderEliminarInteresante como siempre, consigues con un hecho explicado de forma sencilla provocar una reflexión sobre el control de nuestros actos, la fuerza de voluntad y enfermedades cuando eso no se controla.
Un saludito y feliz finde.
Por delante la sonrisa para no quedarnos mustios ante el problema que tienen algunos. Después pensar en las posibles soluciones y después la fuerza de voluntad para aplicar los respectivos remedios, que no pasan por las neveras arriba ni las camas abajo, ni las escaleras mecánicas de Chari ni la silla eléctrica de cadena.
EliminarLa fuerza de voluntad y una buena sesión de spining o bicicleta puede ser una solución.
Pero yo estoy aquí sólo para poner en aprietos a mis personajes y hacerlos reflexionar sobre su situación.
Por lo cual, tienes toda la razón Conxita. Opino como tu.
Besos y buen fin de semana.
Las escaleras en una vivienda unifamiliar tienen ese inconveniente. Hay que ser muy precavido y tener muy buena memoria y así evitar estar subiendo y bajando porque te has dejado el móvil en la mesilla de noche, o el jersey, o.... Claro que para los que tienen sobrepeso, subir y bajar escaleras es saludable. Aunque otra medida saludable sería resistirse a la tentación y no bajar a por comida. O vivir enclaustrado en su dormitorio durante un tiempo sin comer, jaja
ResponderEliminarEs curioso cómo de una pequeña idea puede salir un microrelato tan original y agudo.
Un abrazo.
Cuando llegó el momento de elegir vivienda opté por piso con ascensor donde otros eligieron vivienda unifamiliar.
EliminarAhora valoro las ventajas al haber elegido lo que elegí. No sólo el sobrepeso puede ser un problema a la hora de subir y bajar escaleras, la vejez, la enfermedad, las articulaciones, el corazón, las roturas de huesos....muchos peros para ser tomados en cuenta. De momento no tengo nada de lo recitado, pero se que todo llega y más vale haber sido precavido.
Y como soluciones factibles las que escribiste en tu comentario.
Un abrazo Josep.
Me reí un montón con este relato corto, lo cierto es que es sorprendente y la verdad ¿no has pensado en subirte la comida y te ahorras tener que bajar? que son muchos kilos que mover jajajaja. Un saludo.
ResponderEliminar¡AHHH! se siente, no es problema mio, es el de mi personaje...que hubiera hecho ejercicio, que hubiera seguido una dieta sana, que se hubiera cuidado.
EliminarY un candado en la nevera tampoco hubiera estado mal. je,je,je.
Gracias Mariola, otro saludo para vos.
Más vale que siga haciendo un poco de ejercicio, vaya tela. Me has hecho sonreír. =P
ResponderEliminarUn abrazo.
Soledad, Soledad, que me dejas muy sólo durante mucho tiempo. sabes que te hecho de menos y eso me hace comer de más.
EliminarGracias por tus sonrisas...¿Son sonrisas malvadas?
Besazos.
jejeje sonrisas traviesas, soy güena. =)
EliminarGenial relato y qué bien expresas la angustia de quien sabe que no debe comer tanto pero no puede expresarlo. Te lo dice alguien que trabaja en nutrición y precisamente con personas obesas.
ResponderEliminarAnte la diversidad de consejos para tu protagonista vertidos en los anteriores comentarios yo le diría que quizás esas escaleras es el único ejercicio que consigue hacer, así que no mueva la cama de donde está.
"Tan importante es lo que se come como lo que se deja de comer" Willett.
Un beso.
P.D. En lugar de "expresarlo" quise decir "evitarlo"
EliminarSi, meterse en la piel del personaje es muchas veces agobiante. Al escribir tienes que expresar sus sentimientos y sus ideas.Y me falta experiencia en ese campo ¡Gracias al cielo! pero a algunos conozco. De los que son gordos por comer sin control y los que sin comer a penas, no pueden regular su peso.
EliminarTú como profesional en nutrición tendrás que bregar diariamente con temas escabrosos sobre la obesidad mórbida.
Este corto lo aliñé con un poco de humor, pero es un problema grave el asunto.
Besos
Con ese peso yo optaría por poner más peldaños, de tal manera que al menos haría ejercicio, o eso, o que deje de comer tanto. jajajaja Pobre hombre, que dilema. Gracias por la risa Francisco.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
¡Mira! otra solución original: Más peldaños. así a lo mejor la misma pereza de tener que subirlos o bajarlos le quitaría esas hambres desmesuradas.
EliminarMuchas gracias Mila y gracias por el consejo je,je.
Besos
Qué bueno...inesperado relato( ya me había preparado para el miedo :(
ResponderEliminarA ver... no es mejor q no tenga comida en casa?. A salir cada día a comprar lo necesario
y cuando apriete el hambre a deshoras... una infusión, eso "mata" el hambre, q lo digo yo q sé deso ;)
Es q dice q con su fuerza de voluntad no es suficiente... habrá q ayudarle de alguna manera, no?.
Te sonrío conn el Alma.
Cuando apriete el hambre una manzana que quita ese gusanillo y sacia; lo de algunos es ya pura gula,y esa no tiene más remedio que la contención a base de voluntad.
EliminarLo de no tener comida en caso lo veo algo inviable, no creo que aguantara dos días. Un paseo diario le vendría sin embargo requetebien.
Gracias por dejar tu opinión comentada.
Un placer.
Recibe un abrazo desde el alma.
Gracias Francisco por tu aportación a compartir mis escritos. Yo os he contado que estoy penalizada y no se por que. Muchas gracia.
ResponderEliminarP.D.Amigo Francisco, no puedo lanzar mis trabajos de mi blog , estoy penalizada y hasta el día 20 no me dejan compartir, si los queréis leer tenéis que verlos en mi blog. Tengo otro entrega de Arrugasen la sabana y una carta para el concurso de relatos extraordinarios Vosotros si los podéis compartir y difundir. No os podré contestar, os contestaré a través de vuestros blog. Tengo algunos apartados en Diseño, páginas que no puedo subirlas al lugar de los otros espero que puedas dedicarle un poco de tiempo y me las subas. Si no es molestia ,o indícame de nuevo como se hace. Besos
Hola Maria.
EliminarMe pillas con el paso cambiado. no puedo imaginar porqué te han penalizado si no has hecho nada indebido ni has abusado (creo) en compartir trabajos ajenos. Es algo que he oído a otros blogueros, pero nadie se explica las razones. Tendremos que evitar las comunidades y centrarnos en nuestros blogs y evitar las nominaciones y los enlaces y lo demás. me informaré al respecto.
Besos y paciencia.
Venden unas neveritas muy monas y muy chiquitas que te podrías subir a tu habitación, jajaja
ResponderEliminarSi Eva, las venden, pero para eso hay que ir a la tienda y está un poquito lejos, y coger el teléfono para encargarla y me la traigan a casa también me da un poco de pereza... A lo mejor la culpa de todo ese problema la tiene esa dichosa palabra. je,je.
EliminarUn abrazo
Uuuuuy, cuidadín con las comidas entrehorass..
ResponderEliminarBesos
¡Cierto! pueden tener mucho peligro. Aunque otros entendidos recomiendan comer entre horas pero poco.
EliminarTodo un dilema.
Besos amiga.
Conozco un remedio para lograrlo y viene precedido de esa frase tan solemne como impertinente: ¡A pasar hambre! o de lo contrario, me temo que tampoco va a haber una cama donde acoger con mimo esos 198 kilos ¡nada más ni nada menos! ja,ja,ja,ja,ja
ResponderEliminarUn micro muy divertido.
Un abrazo y ¡feliz inicio de semana!
¡Ajá! Estrella. Esa frase impertinente es la que salvaría a más de uno de ponerla en práctica.Tristemente, y es obvio, en países donde no hay sobre abundancia ni bien estar, tampoco abundan los obesos mórbidos.
EliminarYa tardabas en pasarte por aquí, y me alegro mucho de verte (Engordo de satisfacción) de que te añadas a mi causa.
Un abrazo.
jajaja, ha sido gracioso, sin embargo, no deja de ser preocupante el tema de la obesidad. Bien pensado, tiene la ventaja de que al subir y bajar escaleras cada vez que vaya a picar al menos quemará calorías...
ResponderEliminarUn micro muy ameno de leer.
Besos
Veo que te estás poniendo al día. Estoy persiguiéndote por todo el blog tras tus comentarios.
EliminarMe alegro que hayas pasado un buen rato con este.
Besos
Por lo menos las escaleras le hacen hacer un poco de ejercicio, ¡madre mía!!! No me lo esperaba, jajaja
ResponderEliminarSi me entran ganas de picotear entre horas leeré tu entrada, ;)
Besos.
Sólo está permitido picotear letras de vez en cuando entre horas, esas no engordan nada más que la cultura y esa, no pesa ni se nota en la cintura,
ResponderEliminarBesos