La
muerte se ha olvidado de nosotros, ella que corría tras nuestros pasos y nos
llenaba de miedo con su nombre.
Ella
que nos acechaba y nos emboscaba para sorprendernos en un descuido por si podía arrebatarnos la vida. El tesoro más deseado por su codiciosa guadaña.
Ahora
que reposamos, es cuando no muestra interés alguno por nosotros. Desentendiéndose, ignorando nuestra presencia quieta, fría y desolada.
Derechos de autor: Francisco moroz
Qué fúnebre, por Dios...Pero es que claro, empezando con esa frase poco se podía hacer para que el post diera un alegre giro.
ResponderEliminarUn beso, Francisco.
PD: Cuánto tiempo sin ser la prime en comentar ;-)
Esta vez has sido la primera, no te quepa duda.
EliminarLa muerte trae el sentimiento fúnebre con su simple mención ,es inevitable no imaginarla con su manteo negro y su huesudo rostro, empuñando en su mano la temida guadaña.
Besos.
Qué relato más bueno, Francisco. La muerte es caprichosa como un niño mimado. Muestra interés por el juguete hasta que lo consigue y después lo olvida y abandona.
ResponderEliminarUn beso.
¡Ay amiga! Y cuando no te parece bueno. Eres muy complaciente y amable. La muerte no deja ser ese reflejo al que sometemos nuestra imagen con virtudes, sentires y defectos.
EliminarAlguien dijo en una ocasión: " Si quieres ver a la muerte, mírate en el espejo"
Te dejo un beso.
La muerte parece tan humana... en cuanto consigue algo, pierde interés.
ResponderEliminarMe ha encantado, como siempre.
Un beso enorme, Francisco
También es como los gatos jugando con sus víctimas antes de acabar con ellas. Nos persigue, nos mata y se olvida de nosotros.
EliminarGracias por tus palabras Chari.
Un beso grande también para ti
Vaya, qué repelús.
ResponderEliminarPensar que una vez que no estemos tengamos conciencia y sintamos toda esa soledad.
Da bastante miedo.
Muy bueno.
Un beso.
Por nuestro bien espero que no sea como dices. Desde el más allá veremos, digo yo, las cosas desde otro ángulo y perspectiva diferente que nos quite esos prejuicios sobre la muerte arrebatadora, pero también liberadora del sufrimiento.
EliminarBesos
Ciertamente es caprichosa y voluble, cuando consigue se olvida.
ResponderEliminarBesos
Se la nombra en femenino, con lo cual caprichosa y voluble ha de ser en cierta medida ¿No crees? Aunque las mujeres no soléis olvidar fácilmente nada je,je.
EliminarBesos.
La muerte actúa como muchos humanos, te busca para sus propios fines y cuando ya consigue lo que quiere, si te he visto no me acuerdo, pasa de ti.
ResponderEliminarUn beso.
De hecho todos somos parte de esa muerte.
EliminarUn rótulo que leí dentro de una catedral rezaba al pie de una calavera: "Como te veo me vi, como me ves te verás" Es parte de nuestro sino al ser mortales.
Un beso.
Hecho el trabajo encomendado no tiene porqué aguantar recriminaciones de aquellos a los que atendió en su momento. Por lo tanto hace oídos sordos. ¿Tiene oídos la muerte?¿Nos escucha?
ResponderEliminarUn abrazo Julio.