Siempre
queda un recuerdo tras la muerte
nunca
se ha de dar una batalla por perdida.
No
olvidaros que el final del camino es recompensa,
a
pesar del dolor, del fracaso y la fatiga.
Siempre
hay un amanecer tras el ocaso
algún
campo que recordar en el destierro.
Un
buen amigo que te abrace en la distancia,
o una primavera que estrenar tras el invierno.
Una
certeza hilvanada con la duda
y
una mirada limpia que te acepte como eres.
El
corazón amado que añora tus regresos,
y
esa sencilla flor que brota en la basura.
Y
es por ello que la pasión la pinto en rojo,
la
pureza del alma en azul celeste.
Y
si tengo que poner color a la esperanza
coloreo
en verde la vida que yo espero.
Derechos de autor: Francisco Moroz
Una inyección de optimismo
ResponderEliminarDe eso se trata, de buscar lo positivo de cada cosa. la vida, de esta forma se vuelve más amable.
EliminarUn saludo Ángel.
Es bueno pensar que hay muchas cosas buenas esperándonos. Un abrazo
ResponderEliminarSer asertivo te prepara para afrontar los malos momentos y hacerlos más leves y esperanzadores.
EliminarUn abrazo Zarzamora.
Un poema colorista.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias amigo. Colorista no se, pero intenta ser un mensaje positivo.
EliminarUn abrazo.
un poema lleno de optimismo, precioso. un abrazo
ResponderEliminarGracias Teresa. Así es y así lo captaste.
EliminarUn abrazo.
Un poema lleno de color y optimismo. Me encantó. Un abrazo
ResponderEliminarDe vez en cuando hay que desintoxicar las neuronas y darles un respiro versado de positivismo.
EliminarUn abrazo
Eres un artista Francisco, tocas todos los géneros.
ResponderEliminarMe gusta el optimismo que desprende este poema, me gusta ese quedarse con el color verde de esperanza, de primavera, de alegría.
Besos
No me califican con ese adjetivo todos los días, por tanto te doy las gracias por tu afecto.
EliminarEsos colores definen sentimientos o al menos emociones básicas.El verde esperanza es un tópico que se ha utilizado siempre para ese saber esperar. No en vano la primavera se adorna de ese mismo color, aunque también de otros muchos.
Besos, amiga
Muy bonito, Francisco y muy vital y colorido. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarUn beso.
Te quedo muy agradecido. tus ranitas son del mismo color que la esperanza ¿Te fijaste?
EliminarBesos, amiga.
¡Pero que hermosas letras hechas poemas! Ha sido como acariciar el alma y dejar en ella el recuerdo de una vida.
ResponderEliminarMe encantó, amigo, Francisco.
Abrazos-)
¡Guauuu! Que descripción más bonita has hecho de estas letras.Tú si que eres un verdadero encanto de persona y de mujer.
EliminarBesos merecidos Mila.
Qué imagen más preciosa Francisco, :)
ResponderEliminarEs un canto a la esperanza.
Te miro con esa mirada limpia (que nombras) y te digo que lo que veo es admirable.
Besos.
También te presiento yo a ti como una gran persona adornada con una bonita e interesante personalidad y dulce forma de ser.
EliminarTu mirada limpia me arropa.
Besos sentidos.
Precioso poema Francisco. La positividad siempre ha de ir en el equipaje y la esperanza en el fondo para que no se pierda, da igual el color con que uno la pinte, verde pues verde, pero que no falte jamás.
ResponderEliminarBellisimo.
Abrazos.
No se yo si se ha de llevar en el fondo de la mochila o tenerla muy por el contrario a mano; para las difíciles ocasiones en la que los palos del sombrajo se nos caen encima.
EliminarBellisima tú que adornas con comentarios las entradas.
Besos.
El optimismo da color a cada experiencia de la vida, la tiñe de una luz especial y la hace más llevadera. Ojalá siempre fuéramos capaces de mirar a través de ese prisma.
ResponderEliminarBonito poema, Francisco, está lleno de vitalidad :)
Besos.
Gracias Julia. La luz es blanca aparentemente, y solo la refracción la hace colorida. con lo cual y metafóricamente, aunque la vida y las experiencias de cada cual sean las mismas o parecidas, seremos nosotros los que las hagamos personales y emocionalmente íntimas. Viendo la parte positiva o negativa según la refracción de nuestra alma.
EliminarBesos