lunes, 27 de febrero de 2017

Carnaval des animaux





Cuando llegaste no te conocía, pero enseguida conectamos los dos de tal manera, que me hicieron responsable de tu aprendizaje; me convertí en más que un compañero. Disfrutábamos juntos, y compartimos muchas situaciones que recuerdo con verdadero deleite.

Casi nos hemos convertido en pareja de hecho, solo nos falta irnos a vivir juntos, pero ese paso no me atrevo a darlo todavía ¿Qué pensaría la gente si nos viera caminar por la calle de la mano?
Por lo tanto tan solo somos amigos, pero muy especiales, y lo dejaremos ahí de momento. Los pasos importantes hay que darlos con moderación.

Por eso me tiene tan asustado la propuesta del director para que los empleados asistamos mañana al trabajo disfrazados para que los clientes se encuentren con un ambiente especial, y de esta manera compartir con ellos nuestra actividad cotidiana, y de paso, naturalmente, promocionar el centro ¡Ni que esto fuese Disneylandia o el circo Bailey de los hermanos Ringling y Barnum! Uno tiene su dignidad y el payaso lo hago cuando a mi me da la gana y no cuando quieren los demás.

Ya sé que es carnaval y que te haría ilusión verme disfrazado. Participar conmigo como acompañante femenina, pero sabes que no me gustan estas tonterías que se inventan los que no tienen otra cosa mejor que hacer que entretenerse con estos espectáculos tan superfluos.

Creo que mi cometido es quererte y cuidarte para que no te falte de nada. Tenerte como a una reina, como a la niña de mis ojos, pues la verdad es que a simpática y cariñosa no te gana ninguna.
Creo que hasta los compañeros de trabajo nos tienen cierta envidia, y que a algunos les gustaría estar en mi lugar, haberse ganado tu confianza y tu amor.

Por otro lado, sabes que ya se ríen bastante de los frikis como yo, y que bastaría con que me vieran aparecer disfrazado con una máscara, una capa, y mallas ajustadas, para empezar a cachondearse a mi costa durante toda la jornada. No quiero que te avergüences de mí, preciosa.

Tampoco me gusta aparentar ser alguien que no soy en realidad: un pirata, un guerrero con armadura, un Cherlock Holmes de pacotilla, el Yeti, Drácula o un hombre de las cavernas. Batman o Spiderman ¡Me niego a parecer un gilipollas!

Me encuentro bien con lo que soy, me basta con que tú me mires con esos ojazos que tienes como dos soles para sentirme como un súper héroe y no creo que tenga que ponerme nada para poder acompañarte. Seguro que te haría ilusión ¡Lo reconozco! Pero de verdad que no lo considero oportuno, me sentiría ridículo y fuera de lugar.

No nos hace falta disfrazarnos de nada para ser el centro de todas las miradas. Mi uniforme tampoco está tan mal y sabes de hecho, que hacemos tan buena pareja que llamamos la atención de los clientes que se dan la vuelta cuando nos ven pasar.

¡No obstante te sorprenderé! ¡Lo haré solo por ti! Y te adelanto que no me pondré ropa, más bien me la quitaré, y de esa forma me presentaré ante tu pabellón y aunque te llames “Nica”, te diré:

–Hoy estás especialmente mona, Chita. –Para a continuación lanzar el característico grito mientras me golpeo el pecho con los puños, sorprendiendo a los desprevenidos visitantes.

Para celebrar como Dios manda un carnaval dentro del zoo, no hace falta hacer tantas monadas como pretenden que hagamos.


– ¡Que les den morcillas a todos! Mientras tú y yo felices, comeremos bananas.

Como cuidador no tengo precio.



Derechos de autor: Francisco Moroz


Este relato se presentó al reto de los relatos anónimos de la comunidad de: Relatos compulsivos






20 comentarios:

  1. Me ha encantado, y no me esperaba para nada ese final, como tú solo sabes hacer.
    Un besillo de mono.

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    1. gracias guapa. un placer que me leas con tanto cariño.
      Besos

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  2. Me ha gustado mucho como va la narración. Yo pensando el final nos la dá jajajja y si yo estaba que era tu compañera y perro pero al final va de mono/as. Muy bueno como siempre. Besos

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    1. De momento os sigo sorprendiendo, la verdad es que me gusta hacerlo. espero que no se me agoten las ideas o estas no sean muy previsibles.
      Un besos Mamen.

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  3. Me ha encantado Francisco, y me he reído mucho con el inesperado final. Un abrazo carnavalesco! ; )

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    1. Tus risas ya amortizaron el relato.
      muchas gracias compañero.
      Un abrazo

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  4. Supongo que no te costará creer que desde la primera línea intentaba saber por dónde saldrías esta ves y mira tú que no lo esperaba, ya te he comentado otras veces esa capacidad para las sorpresas que tienes y esos giros inesperados que le das a los relatos, magnifica tu imaginación que nos deja ratos bien divertidos.
    Mucha suerte con tus retos.
    Un beso

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    1. Ya os voy conociendo y me imagino que cuando empezáis a leerme ya estáis pergeñando el posible final.
      Eso me congratula, sobre todo cuando a pesar de todo me salgo por peteneras y os descoloco.
      espero seguir haciéndolo durante mucho tiempo, eso querrá decir que las musas me siguen acompañando y que vosotros me seguís leyendo.
      Besos, amiga

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  5. Hasta el final pensé que se refería a una perrita, su mascota, pero no, me has tenido pendiente del desenlace hasta el último momento, como a ti te gusta, jeje. Así que objetivo cumplido y, además, muy bien cumplido pues ha resultado una lectura muy entretenida.
    Por cierto, por extraño que parezca, jamás me he disfrazado. Ni he disfrazado a mi perro, como algunos hacen.
    Un abrazo.

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    1. ¡Así me gusta! que os estrujéis las neuronas de la imaginación e intentéis adivinar que es lo que me traigo entre letras.
      Para mi es un inmenso placer engañaros con esos finales inesperados
      Recibe un abrazo Josep, junto con mi agradecimiento por tu comentario.

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  6. Que bueno tú relato, enganchada como siempre hasta el final, un final que nunca deja de sorprenderme.
    Yo me he disfrazado poco en mi vida, y ya de mayor, cuando tenia los veintitantos de arbitro de fútbol jeje, y luego mucho mas tarde de India jejee, en fin para que veas, eso si, me gusta mucho el Carnaval de Alicante, hay mucho ambiente y los disfraces algunos son de los que te dejan la boca abierta, hay mucha mucha imaginación, merece la pena, ahora sueño con ir al de Cádiz o el Santa Cruz de Tenerife, pero bueno de ilusión también se vive. un abrazo. TERE.

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    1. Eres una fiel lectora ¡Ya lo creo! y me agrada que le hayas cogido gusto a estos relatos con "trampa".
      Yo me he disfrazado de joven, pero nunca con motivo de los carnavales. más bien fiestas que preparábamos los amigos con motivo de cumpleaños o fiestas particulares con personas de confianza.
      Te imagino con el disfraz de árbitro...ja,ja.
      Un abrazo Teresa.

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  7. Lo que más me divierte cuando te leo en uno de estos es que sé que me vas a sorprender al final, y, aunque quiera, - y que conste que lo intento - nunca logro imaginar el final con el que me sorprenderás. Muy bueno, Francisco ;)!

    Un beso grande!

    Fer

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    1. La verdad es que para mi ya supone todo un reto el poder escribir estos relatos cortos añadiendo esos finales que ya buscáis por anticipado. El día que no los tenga, os va a resultar la lectura muy sosa y os parecerá aburrida.
      ¡Ojalá no ocurra por Dios!
      Besos querida Fer.

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  8. Muy bueno. No me extraña que no quiera irse a vivir con ella. Puede ser complicado. Y si un gato suelta pelos, no te digo esta...
    Totalmente de acuerdo con el cuidador: a mí tampoco me gusta disfrazarme y hacer el gilipollas. Bastante hace una el ridículo disfrazada de sí misma, como para hacerlo de forma vicaria.
    Un beso.

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    1. Ja,ja. Es o que más preocupa al cuidador: hacer el gilipollas mayormente. Pero por el cariño que profesa al animalito que tiene a su cuidado es capaz no solo de ponerse sino de quitarse ropa para aparentar ser el rey de los monos, animal que por otro lado nunca metería en una casa.
      Besos Rosa.

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  9. Jajaja, estupendo relato. Mira que el título lo he intentado descifrar cual enigma pero ni así. Qué tierno me ha resultado lo de "hoy estás especialmente mona, Chita". Tu imaginación es desbordante.
    Un beso, Francisco.

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    1. Gracias Chelo. ¿Ya desde el principio buscando finales sorpresivos? Os estáis mal acostumbrando.
      Y por otro lado te diré que en el mundo animal también existen parámetros de belleza inusual que nosotros no somos capaces de apreciar por pertenecer a género diferente.Ya sabes lo del refrán: Aunque la mona se vista de seda... Pero a los monos se les caería la baba.
      Besos Amiga.

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  10. Enhorabuena por tan merecido premio, tus finales crean tendencia y son reconocidos, me alegro mucho.
    Por cierto, yo tampoco veo bien que a un cuidador del zoo le vistan de Tarzán por muchos monos que cuide.
    Besos.

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    1. Bueno, el disfraz era de libre elección, pero este operario es de los mejores y sabe adaptarse a su condición de cuidador de monos.
      Besos Kirke.

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