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martes, 20 de septiembre de 2016

Grafito



El lápiz con el que ella, cada mañana, se lo dibujaba en un papel, era el mismo con el que su madre se lo dibujaba cuando era niña.

Toda una tradición familiar la de pintar corazones de grafito a los hijos. Siempre con un ¡Te quiero! adentro, que lo decía todo.




Derechos de autor: Francisco Moroz

martes, 13 de septiembre de 2016

Tolerancia cero





Despotricar contra los vecinos no era la solución ante los problemas de convivencia que sufría. Él no se consideraba una persona conflictiva como para que todos lo rechazaran.

Un mes de julio, a las tres de la madrugada, cuando todos dormían, tomó una decisión que le cambiaría la vida: incendió el bloque donde habitaba, acabó con sus conflictos y los molestos inquilinos.

Hoy en la celda de tres por cuatro que ocupa con otro recluso, recuerda el pasado, y reniega de su perra suerte: Le ha tocado el compañero más difícil con el que mantener una armoniosa relación.



Derechos de autor: Francisco Moroz


miércoles, 13 de julio de 2016

Micro aniversarios






Lo único que no celebraría jamás sería el aniversario de una relación que nunca comenzó.

                                                                                                                   *******     

Cuando lo felicitó por su 50 aniversario de bodas, él la miró con indiferencia preguntándose quién era ella.

                                                                                                                    *******         

Hoy era el 68 aniversario de su promoción en la facultad. Y le extrañó que cada vez asistieran menos compañeros al evento.







Derechos de autor: Francisco Moroz


jueves, 30 de junio de 2016

Okupas



Como si de una plaga venenosa se tratara, llegaron sin avisar, sin llamar a la puerta del apartamento.

Se instalaron cómodamente en el sofá mientras veíamos nuestros programas favoritos, en la silla junto a la mesa, e incluso se atrevían a acostarse en la cama, entre los dos, para separarnos.

Al principio eran soportables como novedad, pero después se hicieron insufribles y dolorosos, y más cuando estábamos con nuestros amigos o marchábamos al trabajo.

Ya me lo advirtió mi madre que los celos no eran buenos consejeros. Ahora tocará desalojarlos de nuestras vidas.



Derechos de autor: Francisco Moroz


lunes, 20 de junio de 2016

Tiempo de cambio




Cuelgan de las cuerdas de la del quinto, como si nada hubiera pasado en realidad.

Un guiño en el ascensor, una provocadora sonrisa, un galanteo, una cita en su piso, unos escarceos en la cama, la entrada de un hombre enfurecido en el cuarto, un cuchillo inesperado, y unas sábanas llenas de sangre.

Después de deshacernos del cadáver hicimos la colada y hoy cuelgan blancas como la nieve en las cuerdas del tendedero de mi nueva, peligrosa y apasionada compañera que ha cambiado de amante.


derechos de autor: Francisco Moroz


lunes, 13 de junio de 2016

La gran prueba



Las mañanas, si no llueve, las emplearemos para el entrenamiento en carrera y perseverancia. Tienes que estar preparada para competir contra la mejor, sacando partido de todas tus ventajas físicas y mentales con respecto a tu opositora.

Me congratula el que me hayas elegido como entrenador personal. Si te entregas en cuerpo y alma ¡ganarás! estoy casi seguro.

Harás historia con tu proeza, quedando reflejada en los anales de los relatos épicos con un titular que podría parecerse a este: La gran carrera que ganó la tortuga a una liebre.


Derechos de autor: Francisco Moroz


martes, 7 de junio de 2016

El final




Aquel día de verano de 1945 Berlín era una ruina. Esqueletos de edificios, y soldados de varias nacionalidades paseando por sus calles desechas, conformaban el paisaje de una ciudad fantasma.

Habíamos ganado la guerra a costa de la pérdida de muchas vidas.
Stalin se anunciaba como el salvador, los vencedores se repartían los barrios; la puerta de Brandenburgo ennegrecida por el humo era testigo de una liberación ficticia.

Otra guerra más fría que la anterior encarcelaría a los ciudadanos detrás de un muro de hormigón, cerca de un telón de acero…

...Por fin regresé. Mi ciudad era escombro, mi casa no existía, mi familia y amigos habían muerto

Ese verano todo terminó: la guerra, y mi vida.


Derechos de autor: Francisco Moroz


domingo, 29 de mayo de 2016

Primer aniversario



Se acercaba la fecha en la que ambos se conocieron por primera vez.

Él no la había olvidado; se preguntaba si ella se acordaría de este aniversario tan especial. Si al menos le llamaría para felicitarle por aquel encuentro en el pasado que tantos recuerdos le traían a la cabeza... 

Por ejemplo, el de aquella primera vez en la que se encontraron que fue la última.



Derechos de autor: Francisco Moroz 


lunes, 23 de mayo de 2016

Viento divino


En esta casa no vive Mizuki Tanaka desde que el viento divino se lo arrebató a su
familia. Ellos saben que habita con los dioses, y cuando celebran su aniversario pronuncian las palabras: patriota, y guerrero glorioso.

Todos saben que en 1944 muchos jóvenes como él se alistaron en la armada imperial para luchar contra el invasor.

Mizuki fue uno de los primeros en anudarse a la cabeza el pañuelo con el símbolo del sol naciente, de los primeros en subirse a un  avión cargado con explosivos y estrellarse contra un destructor perteneciente a los aliados.
Estos les llamaron kamikazes suicidas, los suyos,héroes.



Derechos de autor: Francisco Moroz

Con licencia


martes, 17 de mayo de 2016

Flores exóticas



Desde el otro lado del planeta procedían aquellas flores que pretendía regalar a su amada; le habían resultado tan costosas como difíciles de conseguir. Pero tenía contactos al igual que dinero.

Él, estaba perdidamente enamorado de esa mujer desde que la vio en la embajada, y estaba dispuesto a conquistarla y a hacerla suya a costa de lo que fuera.

Lo que nunca pudo imaginar el “Casanova”, es que iba a ser rechazado por esa funcionaria de la embajada de Vietnam del Norte; pues ella era oriunda de ese país, en que las flores que le fueron entregadas, eran de lo más común. 



Derechos de autor: Francisco Moroz
con licencia


lunes, 9 de mayo de 2016

Hechos aislados




El agua espantaba a las avispas escondidas bajo las hojas mientras fabricaban su avispero. Era el comienzo del fin; y estos insectos todavía no se habían percatado, al igual que otros muchos seres que seguían pululando por la tierra, que no verían un nuevo amanecer.


Mientras tanto, este detalle también pasaba desapercibido para un grupo humano que observaban con estupor, como unos cuantos vecinos se introducían, en una enorme estructura de madera allá en el valle.



Derechos de autor: Francisco Moroz

Registrado con licencia: 

lunes, 2 de mayo de 2016

R.I.P chef



-Es como sale mejor la paella con bogavante ¡Cateto! y no la bazofia que has preparado que no se la comería ni un muerto de hambre. Eres un aprendiz de cocinero, un fraude sin ningún arte culinario, sin derecho a pisar las cocinas ni utilizar mis fogones…

Todo esto me lo dijo el chef delante del público y de las cámaras que me enfocaban mientras yo, bajaba la cabeza avergonzado.

Me superé a mí mismo, y practicando, llegué a ser el mejor.

Hoy he preparado un arroz con bogavante sin bogavante y con carne que parece de pollo pero tampoco lo es.


Derechos de autor: Francisco Moroz

                                                                                              Código de registro: 1605027409189

lunes, 18 de abril de 2016

Claúsula




Acuérdate de lanzar mis cenizas al mar, es la única condición que te pongo para que heredes la mansión. Quedaría fatal que después de deshacerte de mí solo para conseguir tus propósitos; las dejaras abandonadas en la chimenea.



derechos de autor: Francisco Moroz

Código de registro: 1605087457960

martes, 12 de abril de 2016

Último aviso




-El día que una ola salte más de lo convenido, podrá significar que el mar está cansado de tanto expolio y de tanta basura pegajosa y negra vertida en él.

El año en que el sol seque los campos y nos queme la piel en exceso, y el invierno nos escatime la lluvia, y el aire levante los tejados; será quizás la señal convenida para que vayamos preparando las maletas para mudarnos.

-¡Por Dios papá! Deja de asustar a tu nieto contándole esa historia de miedo.


-Miedo hija, será la última imagen que se verá reflejada en los ojos de los que vivan todavía, sin haber querido escucharla.


derechos de autor: Francisco Moroz

Código de registro: 1605087458011

martes, 5 de abril de 2016

Puntualizar



Deja unos puntos suspensivos... de suspense, al pasar por su lado como el que no quiere la cosa, sin necesidad de decir su nombre. Coloca en el aire unos signos de admiración donde escribe un ¡Te quiero! y tras un punto y seguido. La abraza como argumento de una trama de amor, y dice con los ojos tantas cosas que no hay letras suficientes, ni adjetivos con los que calificar tanta pasión (entre paréntesis).


Volverá a por ella tras la coma, para comérsela a besos, y dedicarla toda su historia tras un punto sin final.


Derechos de autor: Francisco Moroz

Código de registro: 1605087458035

lunes, 21 de marzo de 2016

Profesión de fe



Las palabras que ha aprendido por la noche son las que decidirán su muerte o su supervivencia. No hay esperanza para un cautivo después de haber sido apresado por el enemigo del autentico Dios; solo unas palabras a las que agarrarse después de habérselas escuchado a otro prisionero habiéndolas memorizado de forma mecánica en su cabeza.

Nunca tendrá la seguridad de un mañana, si no tienta a la suerte dirigiéndose a sus guardianes cuando le pregunten si está decidido a renunciar a su fe.

El les contestará entonces con seguridad fingida: “No hay más Dios que el Dios y Muhammad es el mensajero de el Dios”



derechos de autor: Francisco Moroz

jueves, 17 de marzo de 2016

Rutina verbal




Lo que daría porque fuese ya de día y su dulce voz susurrase “lavavajillas”, “espumadera” o “colesterol” y no toda esa sarta de tonterías cursis que suelta cuanto pretende recabar mi atención: “Cariño”, “Encanto” o “Querido mío” que me suenan tan falsas.

Después de tantos años conviviendo uno ya sabe por dónde van los tiros, y no me engaño con tanta palabra dulce a la hora de despertar.

Si ella tiene previsto salir de tiendas, con la idea prefijada de comprar ese bolso o esos pendientes que vio el día anterior en el escaparate; sé que el prólogo correspondiente de la historia serán esas palabras.

Por eso mis preferidas son las conocidas y rutinarias.



Derechos de autor: Francisco Moroz

martes, 8 de marzo de 2016

Protocolario



Serán solo cien palabras o menos las que podrá pronunciar en su encuentro con el rey,  pues se trata como comprenderá, de un acto oficial  muy selecto donde muchos de los presentes al igual que usted, querrán formularle alguna pregunta a su majestad; y el tiempo es limitado.

Su alteza debe asistir a continuación a una comida con diplomáticos extranjeros servida en este hotel.

Así me informó el jefe de protocolo de la casa real.

Llegado el momento de hacer las preguntas levanté la mano y con voz muy profesional interpelé al monarca:
¿Qué prefiere que prepare? ¿Carne o pescado?...


Me sobraron 93 palabras.


Derechos de autor: Francisco Moroz

lunes, 22 de febrero de 2016

Simple detalle




Cada vez que la hablada del último sobre rechazado me  interpelaba pidiéndome explicaciones del porqué ocurría.
¿Es que los de la compañía la tenían manía?

Era como dialogar con una sorda, nunca quería escuchar las razones, simplemente porque no llegaba a comprenderlas. Pertenecía a una generación acostumbrada a lidiar con las nuevas tecnologías, a comunicarse por medio de los correos electrónicos y utilizar las aplicaciones ofrecidas por la telefonía móvil.

Como hacerla entrar en razón y demostrarla que no se trataba de que la tuvieran tirria los de la compañía postal, sino que el motivo de la devolución era, la ausencia del obligado y consabido sello en las cartas enviadas. 



Derechos de autor: Francisco Moroz

lunes, 15 de febrero de 2016

Un hombre honesto



Era de los pocos detectives honrados que quedaban en la ciudad, recomendación de mi abogado.  Por ello lo elegí para que realizara una investigación exhaustiva de los empleados  financieros de mi empresa.

Hacía tiempo que alguien se encargaba de desviar fondos a una cuenta privada. En definitiva, me estaban robando.

Me entrevisté con él para concretar los términos de su contrato. Se dedicaría a trabajar en exclusiva para mí hasta descubrir al estafador.

Después de dejar claros todos los puntos le pregunté cuanto me cobraría; Una vez acordada la cantidad me preguntó a su vez:

 ¿Con factura o sin factura?



Derechos de autor: Francisco Moroz

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